Cristóbal Colón
Cristóbal Colón es un explorador legendario que siempre estará en la lista de famosos comandantes navales. Su búsqueda de un nuevo camino marítimo a la India llevó al encuentro con un continente desconocido y al descubrimiento del Nuevo Mundo. Este viaje marcó el comienzo de una nueva era de descubrimientos geográficos y permitió la colonización de las Américas. Quédate con nosotros y aprende más sobre el asombroso camino de vida de este marino valiente y el impacto de sus viajes en la historia mundial.
Biografía y vida temprana de Cristóbal Colón
Nos han llegado gran cantidad de cartas, notas, y crónicas que nos ayudaron a reconstruir la historia del gran navegante. Hay poca información acerca de su edad temprana, pero algunas fuentes adivinan en su firma las raíces portuguesas y cuentan que Cristóbal Colón nació en 1451 en Génova y la familia vivía cerca de las torres de Porta Soprano.
Se sabe que hablaba cuatro idiomas: italiano, español, portugués y latín, y supuestamente estudiaba en una Universidad en la ciudad de Padua. Pero algunos biógrafos e investigadores nos aseguran que Cristóbal Colón era español.
En los registros notariales de 1470, se indica que a los 19 años, se dedicaba a la elaboración del vino. Durante varios años, el futuro descubridor navegaba cerca de Sicilia, Cerdeña, Córcega y las islas Baleares, conocía la costa aragonesa.
Desde 1477, vivía en Portugal, aunque no está claro cómo llegó allí. Según su hijo Hernando, esto sucedió después de un naufragio en una batalla naval cerca del cabo San Vicente. En 1479, se casó con Felipa Moniz, hija del colonizador de las islas de Madeira, Bartolomeu Perestrelo. Su esposa le brindó las llaves de la nobleza y el acceso a la corte real.
Los Viajes De Cristóbal Colón
Mientras que Portugal y España compitieron en la costa africana, Colón soñaba con encontrar una ruta marítima a la India a través del Atlántico conocido como el mar de la Oscuridad. Él creía que si se dirigía hacia el oeste desde Europa, podría llegar a las costas orientales asiáticas.
Primer viaje a América (1492-1493)
El 3 de agosto de 1492, Cristoforo Colombo y su equipo abandonaron España y se dirigieron hacia las islas Canarias en tres barcos: la “Santa María”, la “Pinta” y la “Niña”. El viaje fue muy largo, se estaba gestando un motín en los barcos, pero después de 33 días un marinero de la “Pinta” vio la tierra. Era una gran isla del archipiélago de las Bahamas. Colón desembarcó y erigió la bandera de Castilla en la isla, declarándola propiedad de España y dándole el nombre católico de San Salvador.
Luego, la flotilla llegó a la costa de Cuba, que Colón confundió con una de las peninsulares de Asia Oriental. El 25 de diciembre, frente a las costas de la gran isla, la “Santa María” se adentró en los arrecifes. Colón llamó a la isla La Española (ahora Haití) y decidió construir el primer asentamiento europeo.
Una parte de la expedición se quedó en la isla y la otra decidió volver. El 15 de marzo de 1493, el barco atracó en el puerto de Palos de la Frontera y así terminó el primer viaje de Colón. Él consideraba las tierras descubiertas del este de Asia, por lo que los europeos comenzaron a llamarlas Indias occidentales, la India e Indonesia propiamente dichas se llamaron en Europa Indias orientales.
El segundo viaje (1493-1496)
Entusiasmados con la noticia de las nuevas y ricas tierras, la pareja real equiparon una nueva expedición que salió de Cádiz en septiembre de 1493. La ruta de la flotilla esta vez transcurrió 10° al sur y, empujados por los vientos alisios del noreste, llegaron a las Antillas Menores 20 días después.
Los españoles encontraron su fuerte destruido, quemado y los restos de los marineros. Resultó que los colonos saquearon a los indios, se llevaron a sus esposas, y los aborígenes rebeldes los reprimieron. Una expedición al interior de la isla descubrió grandes pueblos indios, así como depósitos de oro al pie de las montañas. Pero en el clima cálido, las reservas de alimentos se deterioraron, y Colón decidió enviar a la mayoría de su gente a España con un “Memorando” para los monarcas en el que informaba sobre el oro y “rastros de especias”.
El tercer viaje (1498-1500)
En 1498, Cristóbal Colón puso en marcha la tercera expedición. Seis barcos salieron del Guadalquivir y se dirigieron hacia el suroeste. Llegaron a la isla de Trinidad y vieron por primera vez los contornos de la costa del continente sudamericano. En el delta del río Orinoco, Colón descubrió que el agua en la bahía era dulce. Esto solo podría ser si el río fluyera a través de un vasto continente.
Sin embargo, la nueva colonia se convirtió en una carga para los monarcas españoles. Se hizo evidente que la tierra descubierta por Colón no traería riquezas fabulosas, y esto no es India. El ilustre almirante comenzó a ser acusado de engaño y apropiación indebida de los ingresos reales y en 1500, regresó a España encadenado.
El cuarto viaje (1502-1504)
Tras la liberación, en 1502, Cristóbal Colón hizo otro esfuerzo por encontrar una ruta occidental a la India, desde las nuevas tierras que descubrió. No sabía cuán grande sería el océano Pacífico y esperaba que, moviéndose hacia el oeste, alcanzará las costas de Asia Oriental en algún momento. Después de pasar las Antillas Menores, Colón descubrió la isla de Martinica y pronto los barcos llegaron a Yucatán, tierra de los mayas.
Los españoles encontraron indígenas más adelantados que los habitantes de las Antillas. Tenían telas y ropa de colores, utensilios de bronce y madera, y granos de cacao que usaban como dinero. De ellos, Colón supo que al sur había un país rico, y más allá de las altas montañas, otro mar (el océano Pacífico), pero la expedición enviada al interior del continente no llegó a él. Después de una larga búsqueda, los marineros agotados regresaron a España.
Relaciones con la Corona Española
A finales del siglo XV, muchos comerciantes y navegantes europeos se preocupaban por llegar a la India rica en especias por mar. Cristóbal Colón no fue la excepción y durante 20 años soñó con este viaje. Él dedicó sus planes, primero a los comerciantes genoveses, luego al rey portugués Juan II, pero no encontró apoyo. Entonces apeló a la Corona Española y después siete años y muchos esfuerzos, finalmente obtuvo la financiación. En 1492, él firmó un acuerdo con Fernando e Isabel que incluía:
- Nacionalidad y título nobiliario con derecho a llamarse “don Cristóbal Colón”.
- El rango de Almirante y Virrey de las tierras abiertas.
- La décima parte de los ingresos de las nuevas tierras.
- Transferencia de títulos y propiedades por herencia.
La pareja real entendió que, si la expedición se completaba con éxito, el tesoro español se repondría con fabulosas riquezas. El segundo interés de los reyes fue la difusión del catolicismo entre las tierras abiertas y la población local. Pero Colón no trajo mucho oro y joyas, y los ingresos de las nuevas tierras eran menos importantes que los gastos de equipar expediciones. Por eso, los monarcas españoles rompieron el acuerdo.
Después de la muerte de Cristobal Colon, sus hijos y herederos pelearon con la Corona Española, alegando que la monarquía los había engañado financieramente. Algunos procedimientos se prolongaron hasta el 300 aniversario del famoso viaje.
Impacto de los viajes de Colón
El almirante fue el primer europeo que cruzó el Atlántico. Descubrió la costa de América del Sur y Central, las Antillas y Bahamas, la isla de Trinidad y varias islas en el mar Caribe. Después de su regreso triunfal, el mundo ya no podía seguir siendo el mismo: empezó la era de las posesiones coloniales de ultramar.
El objetivo de la campaña de Colón eran las islas de las especias. El viajero nunca los encontró, pero los descubridores trajeron tomates, patatas, chocolate y tabaco de América a Europa. De Europa llegaron a América col, uvas, trigo, olivos, cerdos y ovejas. El trueque Intercontinental fue llamado “El intercambio de Colón”.
El intercambio también tuvo consecuencias negativas, porque los marineros trajeron enfermedades desconocidas, como viruela y tifus en el Nuevo Mundo. Se cree que el 80 % de los indígenas murieron dentro de 150 años posteriores.
Pero, a pesar de todo, sus descubrimientos han influido en toda la historia de la humanidad. Su contribución fue marcada por un monumento en Barcelona, donde se lo representa de pie sobre un pilar alto y apuntando hacia el mar. El día de Christophorus Columbus se celebra en América el 15 de octubre.
Controversias y críticas
La historia conoce a muchos navegantes que atracaron en el suelo americano antes de Colón. El monje tailandés Hui-shen visitó esta región en el siglo V, Abu Bakr II, el sultán de Mali, que navegó a la costa estadounidense en el siglo XIV, el explorador chino Zheng He, John Cabot, etc.
Por lo tanto, la controversia sobre el descubrimiento de América continúa hasta hoy. Los más populares entre los candidatos fueron los vikingos. La evidencia de sus primacías fue tan poderosa que desde 1964 cada octubre se celebra el día de Leif Erikson, el primer hombre en pisar una nueva tierra.
Las disputas son disputas, pero no se puede omitir el hecho de que fue Cristoforo Colombo quien no solo navegó a las costas del Nuevo Mundo, sino que también le contó al mundo sobre América, aunque no lo sospechó. Por eso es a él a quien pertenecen los laureles del descubridor. En palabras del geógrafo francés del siglo XVIII, Jean d’Anville, fue “el mayor error que condujo al mayor descubrimiento”.
Vale la pena señalar que Colón también dejó un legado debatible. Su viaje permitió establecer vínculos permanentes entre Eurasia y América, lo que llevó al intercambio de culturas, bienes y conocimientos. Sin embargo, la expansión condujo a enfrentamientos con los pueblos locales y fue acompañada de opresión, esclavitud y la destrucción de las culturas Azteca, Maya e Inca.
Legado y reconocimiento después de la muerte
Los contemporáneos del almirante no pudieron apreciar la importancia de su descubrimiento. Cristóbal Colón murió en el olvido el 20 de mayo de 1506, sin saber hasta el final de sus días que descubrió América. Solo después de la expedición de Balboa, Magallanes y Vespucci, los europeos se dieron cuenta de que detrás de las extensiones del Atlántico había una tierra completamente nueva.
En el siglo XVI, lo que Colón buscaba en las “Indias Occidentales” fluyó a Europa: oro y plata Azteca e Inca, piedras preciosas, especias. Y una vez más subió al alto podio de la historia el gran navegante, convirtiéndose en un héroe nacional en países europeos. La historia de viajes de Cristóbal Colón se muestra en muchos dibujos y fotos de reproducciones antiguas.
El almirante es muy respetado en España y en su tierra natal. Uno de los países sudamericanos fue nombrado en su honor: Colombia. En su honor, se nombran las ciudades y las calles, la Universidad en México y el Pico Cristóbal Colón, el punto más alto de Colombia. En Estados Unidos, el 12 de octubre es el Día del el gran pionero y la fiesta nacional.
Por supuesto, si Cristóbal Colón no hubiera descubierto América, alguien más lo habría hecho, pero fue él quien empujó a la humanidad a conocer los misterios de la Tierra. Creía en su sueño y, a pesar de todo, caminaba constantemente hacia la meta. Por lo tanto, sus palabras siguen siendo relevantes: “Nunca cruzarás el océano a menos que tengas el coraje de perder de vista la costa”.
Conclusión
El almirante español hizo un viaje que cambió el curso de la historia, marcó el inicio de una nueva era de grandes descubrimientos geográficos. Sus viajes son un ejemplo de coraje, perseverancia y búsqueda de nuevos horizontes que nos inspiran hasta el día de hoy. Después de conquistar el mar de la Oscuridad, extendió las fronteras del mundo para Europa y creó una cadena de eventos que permitieron a España establecerse en los continentes americanos.
FAQ
Dónde nació Cristóbal Colón?
Cristóbal Colón nació en Génova (Italia).
Quien fue Cristóbal Colón?
Cristóbal Colón fue un navegante y explorador conocido por descubrir América en 1492.
Dónde está enterrado Cristóbal Colón?
Se cree que Cristóbal Colón está enterrado en Sevilla (España). Sin embargo, el lugar exacto de su enterramiento sigue siendo objeto de debate e investigación.